Como hermana gringa, espabilada y moderna de la película Enseñanza de Vida, Chicas sin freno/ Whip It!, la opera prima de la actriz Drew Barrymore recorre los meses definitivos de una adolescente/ buena alumna/ asfixiada por su pueblo y su familia personificada por Ellen Page (la devastadora Niña Mala y Juno también) que descubre el amor por el patinaje grupal de velocidad, la confianza en sí misma, su necesidad de grandeza encaminada a un portentoso futuro fraguado con su esfuerzo, la pérdida de la virginidad y su valor como mujer. Ahí nomás.
Y por si fuera poco es una maravillosa película sobre la amistad femenina sin tragedia de por medio, la alianza de género y el rompimiento generacional. También es adorable, una magnífica comedia vertiginosa que homenajea abiertamente el cine del desaparecido John Hughes (Se busca novio, Experto en diversiones) y una cinta de girl power en las antípodas de Los Ángeles de Charlie (producida también por Barrymore), pero con el mismo desparpajo y tongue in cheek.
De su directora Drew Barrymore, lo sabemos TODO: desde que apareció actuando de niña en el E.T. de Spielberg, esta heredera de rancio abolengo hollywoodense, ha comparecido ante el mundo respecto a sus noviazgos, problemas con el alcohol y las drogas, sus coqueteos con la bisexualidad y su colección de novios comediantes (el último de ellos Jimmy Fallon, presente en este filme).
Pero aquí nos brinda una dirección sobra con harto cambio de foco para presentar personajes, movimientos casi invisibles, edición contundente en los juegos, búsqueda de romance sublime con cámara bajo el agua y una fuerza inusitada en el trabajo con actrices como Marcia Gay Harden, la musa de los Cohen; Zoe Bell, la musa de Tarantino; Juliette Lewis, la favorita de Scorsese, Allen, Bigelow y Stone –ahí nomás; así como con ella misma.
Al igual que Precious, la protagonista de Chicas sin frenos, busca su lugar en la vida; al igual que en La reina Victoria tendrá que luchar contra la desconfianza en el amor y darse su lugar sentimentalmente; como en Zona de Miedo, habrá de enamorarse y triunfar sobre la adenalina; y tal cual en Enseñanza de vida, descubrirá kunderianamente que su vida se halla en otra parte… Arroja su corazón frente a ella y correrá por alcanzarlo, satisfecha al fin.
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